Nuestro
país es uno de los principales destinos de naturaleza en
todo el mundo y en sus tierras hay ingeniosas formas para
disfrutarla
Costarricenses
y extranjeros constantemente se sorprenden de las bellezas
y la diversidad existente en nuestro hermoso país tropical,
así como de la hospitalidad de su gente.
Nuestros destinos turísticos incluyen fincas,
selvas, cataratas, volcanes y playas, entre
otros.
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Esto no es de extrañar porque Costa Rica es uno
de los principales destinos de naturaleza en todo
el mundo, lo cual hace que sea una meca para cientos
de turistas amantes de los tesoros naturales y líder
del ecoturismo responsable.
Este último término se refiere a los viajes cuyo
propósito es interactuar, conocer, contemplar y
conservar la naturaleza, por lo que tienden a realizarse
en áreas poco perturbadas por los humanos.
Dicha característica propicia que cada verano lleguen
colegiales y universitarios de todo el mundo para
aprender más sobre la naturaleza y vivir una cultura
diferente a la suya.
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Muchos
vienen en viajes de estudio y otros a realizar trabajos
comunitarios o cursos de campo. Algunos más nos visitan
con fines turísticos y optan, principalmente por el buceo,
la observación de aves y ballenas.
Y
es que el país reúne características excepcionales: biodiversidad,
variedad de climas y ecosistemas. Además se le reconoce
como destino de sol y playa, de actividades ecoturísticas
y de turismo de aventura durante todo el año.
Dispone, asimismo, de productos que lo diferencian de otros
destinos tales como la observación de mariposas, 850 especies
de aves registradas y tortugas (baulas y verdes), aparte
de una infraestructura aeroportuaria y terrestre en buenas
condiciones.
Costa Rica posee, además, cerca del 6% de la biodiversidad
del planeta y su riqueza natural está protegida por el Sistema
Nacional de Áreas de Conservación que cubre el 25% del territorio
nacional.
Una
de las mayores ventajas de nuestro país es que el turista
lo puede atravesar, de costa a costa, con facilidad y en
pocas horas. Eso le permite al viajero desayunar en el Caribe
y cenar en el Pacífico Central después de atravesar un bosque
lluvioso.
Además
tiene una sólida industria turística, profesional y de calidad.
Ésta conoce muy bien las maravillas escondidas en su territorio
y se las ingenia para desarrollar innovadoras formas de
disfrutar de la naturaleza, aunque con respeto y responsabilidad.
De todo para todos
Aquí
es posible disfrutar de bosques tropicales, secos, lluviosos
y nubosos, así como de volcanes activos, aguas termales,
cataratas, manglares, humedales y playas bañadas por el
Océano Pacífico o el Caribe.
El
paisaje espectacular alberga diversidad de vida animal:
350 mil insectos, 850 especies de aves, 4 especies de monos
y otras maravillas.
Costa
Rica es, adicionalmente, líder mundial en la investigación
de métodos agrícolas amigables con el medio ambiente, oferta
que incluye una creciente cosecha de productos orgánicos
en la cual destacan las hortalizas y los minivegetales.
Este
fascinante mundo está al alcance del turista en plantaciones
y fincas de café, banano, caña de azúcar, cítricos, palmito,
cocodrilos, iguanas, flores y siembras forestales.
Pero también es posible encontrar recorridos turísticos
que son verdaderos clásicos. Algunos de ellos contemplan
travesías por kilómetros de jungla, navegación en
ríos y canales, caminatas en medio de bosques brumosos,
baños en aguas termales, descansos en playas y exploración
en zonas salvajes. |
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Otras
aventuras salidas de lo común resultan de gran interés.
Por ejemplo, incursiones en las zonas más profundas de los
bosques o la visita a playas poco frecuentadas.
A los amantes de las aves los esperan una serie de sitios
excelentes para su observación en humedales, lagunas, esteros,
potreros, ríos, canales y bosques. Estos lugares abarcan
12 zonas de vida en las que habitan más de 800 especies
de aves.
Quienes
gustan de compartir en familia disponen de opciones ideales
para todas las edades. Pueden hacer viajes a regiones donde
encontrarán aguas termales, volcanes, frescas montañas,
bosques y mariposarios.
También
tendrán la oportunidad de explorar las copas de los árboles
caminando por puentes colgantes, visitar auténticas haciendas
costarricenses, pescar, cabalgar y observar el desove de
diferentes tortugas.
Como si fuera poco, nuestro país es un verdadero paraíso
para los niños tal y como lo han comprobado familias del
mundo entero. Estas han descubierto que aquí los pequeñines
son reyes debido a que la familia es un valor muy arraigado
dentro de la población.
Los
que prefieren realizar actividades más fuertes que las familiares
también tienen buenas noticias. Costa Rica les permite llenarse
de adrenalina mediante deslizamientos por los rápidos de
ríos caudalosos, paseos en el mar sobre kayak, ciclismo
de montaña, recorridos en selvas, planeadores y ultraligeros
a motor, excursiones en cuadraciclos, montañismo, ascensos
a volcanes, buceo en mar y navegación por lagos, estuarios
o manglares.
Los
que, contrario a los amantes de las emociones fuertes, se
inclinan por las actividades tranquilas, encontrarán el
espacio necesario para relajarse. Ellos podrán descansar
en una hamaca, tenderse a leer un libro, ir al spa, recibir
masajes, sumergirse en aguas termales o practicar meditación.
A
los enamorados también les espera cálidas noches tropicales
a la luz de la luna y el brillo de las estrellas, junto
a la orilla del mar o en la montaña. Para ellos hay parajes
hermosos en los que pueden tomar baños bajo una cascada
en medio de un entorno exuberante, visitar playas y ensenadas
rocosas que los harán vivir el romance teniendo a la naturaleza
como su cómplice.
¡A
todos, feliz comunicación con la naturaleza y que disfruten
de la tradicional hospitalidad de nuestra gente!
Suplemento
producido por el Instituto Costarricense de Turismo . Comité
Editorial: Silvia Rodríguez, Rafael Quesada, Ivonne Apuy
y Angela Orozco. Información recopilada por María Eugenia
Murillo. Colaboración: Alberto Sánchez.
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